A las 8 de la mañana he quedado con Fernando y Nairo en el puente de Montcada. Jose, un amigo de Fernando se une hasta Sant Celoni así que genial, ya somos 4.
La verdad que estamos gozando de un puente con un tiempo magnifico y ya viene siendo así días atrás. No llueve, que tampoco es lo suyo, pero bueno, para poder salir en bici y practicar ciclismo, pues se agradecen días como estos.
Timidamente, empezamos a dar relevos con mayor intensidad y al final, acabamos tirando con fuerza hasta llegar a Sant Celoni donde nos damos un respiro y nos despedimos casi de Jose. Él llega a Palautordera y se da media vuelta mientras que nosotros seguimos nuestro camino pasando por la larga recta de Santa Margarita en busca de los primeros km de ascensión al Turò de l'Home, por la que sin duda para mi, es "la subida" al Turò, por el "Petit Mortirolo".
Allí a lo lejos ya se ve, allá vamos!!!
Hasta llegar al desvío de La Costa del Montseny, parece que nos respetamos y nos llevamos bien jaja.
Parece que Nairo está peleón y enseguida que pruebo de marcar el ritmo, se suelda a mi rueda.
Nos separamos un poco pero antes de llegar a la zona más llevadera y cargar el plato, ahí vienen los dos de nuevo jaja, esto es la salsa de estas salidas, el esfuerzo personal de cada uno pero también los "piques sanos" que tanta vidilla dan a las grupetas.
Al llegar al cruce nos paramos. Mi hermano y sus compis de OnVelo están ya casi llegando desde Mosquerolas. Gus, Ramónn, Carlos, Juanma...una gente muy sana y con quienes nos echamos muy buenas risas. Un placer companys!!
Ahora subimos todos juntos, o por lo menos así empezamos, luego ya se verá quien es el primero en abrir la veda jaja.
Encaramos las largas rectas de la Font Martina y nos dividimos.
Aunque nos reagrupamos, ni que sea por un rato, para rellenar bidones en la fuente.
Lo bonito de estas subidas también es, aparte de compartirlas y subirlas con gente, pues subir solo, es un reto personal en el que nadie más que tú sabe lo que te exiges para no ceder en el intento de coronar esa montaña que tanta ilusión te hace. Cada uno de los que llega allí arriba pedaleando, seguro que por el camino se habla mucho así mismo. En ocasiones te preguntas por que lo haces, por que no darse la vuelta y dejar de cansarse...pero en esa exigencia con uno mismo, es donde reside la satisfacción personal y el saber que, tras el esfuerzo, si lo consigues, estarás orgulloso de ti mismo y eso, esa sensación es única y muy especial.
Arrancamos, viene un tramo exigente y tenso un poco la cuerda a ver quien va con ganas de jugar. Ramón, quien me ha comentado la táctica antes jeje, es el primero en venirse a rueda. Un fuera de serie, con la edad que tiene y como va!!!
Llegamos a las curvas de herradura e intento aplicar lo que él pretendía hacerme jaja, así que pongo primero un ritmo fuerte para que se le vayan las ganas de atacarme en el tramo de curvas de herradura y luego, continúo apretando para irme ya sólo.
Faltan los últimos 6km y me los tomo con cierta calma, voy pensando mil cosas y de paso contemplando las excepcionales que nos ofrece hoy, esta preciosa montaña.
Antes de llegar al parking veo que por detrás se acercan un par de ellos así que vuelvo a tensar jaja. Al pasar la barrera, sólo me quedan 2km y una parte muy bonita de la ascensión en la que se ve perfectamente el refugio que copa la montaña.
Es aquí donde le grabo un mini video a Gloria y que me hace trasladar la mente a México para mandarle todo mi apoyo y toda la energía positiva de esta inmensa montaña!!
Luego corono y al poco rato empiezan a venir el resto de compañeros.
Que guay tete!! Después de un montón de años y muchas experiencias vividas, aquí arriba de nuevo. Anda que no ha llovido nada eee.
Y como no, también aprovecho para fotografiar a mi Berria que es la segund a vez que sube aquí arriba. Y no es por que no quiera subir más veces aquí, pero sólo por evitar la bajada de estos últimos 6km, que aún están mal para hacer con bici de carretera, casi siempre lo evito.
Y después de estar un rato en este enclave de la geografía catalana, descendemos con precaución pasando por Campins y haciendo allí una parada para comer algo.
Luego, arrancamos y parece que ahora se acabe el mundo jaja. Gus empieza echando leña al fuego y obviamente, todos nos calentamos. Luego a tope por la C-35. Ellos se desvían por Can Bordoi para pasar al otro lado de la Serralada Marina, mientras que nosotros seguimos rodando fuerte dirección a la ctra. de La Roca.
Nos damos un buen calentón, yo doy casi todo cada vez que paso el relevo y trato de mantenerme delante todo el tiempo que puedo para echar una buena mano a mis compañeros.
Al final, llegamos a BCN con 152km, 2150m+ y sobretodo, muy muy contento. Buena salida, buen entreno, buena compañía, buenas vistas, buenos augúrios, buen bocadillo...que más se puede pedir!!
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